26 feb 2010

Rosa Nazional


La descerebrada (en el sentido más peyorativo de la palabra) que ven en la imagen es Ro$a Di€z. Esta elementa vino a Galicia, junto con una serie de peperos en su momento a decirnos cómo teníamos que hablar, planteando un problema inexistente (el peligro del español de caer en la marginación o el desuso ,no sé si reír o llorar...) que, una de dos: o no tiene ni puta idea de la realidad lingüística gallega, o la tiene, y aún así manipula el mensaje para sus (oscuros) intereses, ¿alguien dijo una grande y libre?

Hace no mucho tiempo, esta deleznable señora (en el sentido más peyorativo del término) dijo que Feijóo era muy gallego, en el sentido más peyorativo del término.

Veamos, según la RAE:

gallego, ga.
(Del lat. Gallaecus).
1. adj. Natural de Galicia. U. t. c. s.
2. adj. Perteneciente o relativo a esta comunidad autónoma de España.
3. adj. En Castilla, se dice del viento cauro o noroeste, que viene de la parte de Galicia. U. t. c. s.
4. adj. Ant., Arg., Col. y Ur. Dicho de una persona: Nacida en España o de ascendencia española. U. t. c. s.
5. adj. C. Rica. tonto (‖ falto de entendimiento o razón).
6. adj. El Salv. tartamudo.
7. m. Lengua de los gallegos.
8. m. C. Rica y Nic. Especie de lagartija crestada que vive en las orillas de los ríos y nada con mucha rapidez.
9. m. C. Rica. libélula.
10. m. Cuba y P. Rico. Ave palmípeda de plumaje ceniciento, rabadilla, vientre y cola blancos, patas, pico y párpados rojizos.
11. m. Cuba. En un ingenio, dispositivo que aplana y nivela la caña antes de ser molida.


Ciertamente, el término gallego tiene connotaciones negativas según esta deplorable institución (la RAE, digo), y, curioso, la acepción de "Lengua de los gallegos" está por debajo de la de tonto, o tartamudo (por cierto, únicamente utilizadas así en latinoamérica, y en la boca de esta petarda).

No contenta con haberlo dicho una vez (coincidiremos en que no son palabras muy acertadas) recientemente ha dicho exactamente lo mismo de Zapatero, que "es muy gallego, en el sentido más peyorativo del término".

La Rosa de Ejpaña ha querido matizar (que nunca disculpar) sus declaraciones comentando que "lo dice sin querer ofender, que se refiere a que no se sabe si sube o si baja".

Señora (por llamarle algo), busque peyorativo en el diccionario, y luego vuélvanos a decir que es usted capaz de utilizar un término peyorativo sin querer ofender. No saber si una persona va o viene, no es especialmente negativo, y desde luego, no es el sentido más peyorativo del término. Además, esta acepción no viene recogida en el diccionario.

Vamos, admítalo. Se le ha caído la careta de mosquita muerta (en el sentido más peyorativo del término), y se ha visto quien es usted. Aunque ya se viene viendo desde hace tiempo. Sus ideales discriminatorios no son nuevos, pero esta simple anécdota ha puesto de manifiesto lo que usted y su apestoso (en el sentido más peyorativo del término) partido representan.

Pois, ¿sabes qué che digo...? ¡¡Que te vaias ó carallo!! Os galegos xa sufrimos lacras piores ca ti, e mais aquí estamos. 

NAZIONALISMO ESPAÑOL NO, GRACIAS

19 feb 2010

Timofónica de Ejpaña


El personaje que ven ustedes en la imagen es Cé$ar Ali€rta, presidente de nuestra querida y célebre Timofónica.

Al elemento no se le ha ocurrido otra cosa que, para sacar aún más pasta de donde no la hay, cobrar a los buscadores de internet por usar sus redes. Que uno puede pensar, ¿y a mí qué me importa si le cobran a Google o a Yahoo! si están podridos de pasta? Bueno, el pensamiento es legítimo, pero matizable.

¿Por qué cobrarle ahora a los buscadores? No son el único servicio en la red, y además, estos iluminados deberían plantearse que sin servicios en la red, ¿para qué quiero internet?

Vamos a ver, si quieren cortar el P2P (parece que consume mucho ancho de banda), cobrarle a los buscadores o que se vayan a freír espárragos, y abiertamente dicen que quieren ser ellos los proveedores de los contenidos de la red (controlar y, sobre todo, cobrar lo que vemos en la red) y encima no nos piensan bajar el precio de la línea... ¿quién cojones va a usar internet? ¿Para qué? ¿Para ver correos únicamente? Aunque en el futuro quizá nos cobren también por cada correo, como con los $M$...

Además, el gobierno no ha tardado en sumarse a la fiesta apoyando la iniciativa, y parece que en €uropa ya llevan un tiempo debatiendo esto. Primero fue el paquete telecom, ahora esto.
Encima nos quieren recalcar que a los consumidores finales no nos va a repercutir en lo que pagamos, e incluso nos va a salir más barato internet, y va a ser de mejor calidad... ¿De qué árbol creen que nos hemos caído?

Cuando las barbas del vecino veas cortar... Primero cobran a Google y nos da igual porque le sobra la pasta. Pero el día de mañana uno querrá poner su tiendecita online y se encontrará con que, a parte de pagarse el hosting y el dominio, y la tasa de tráfico al mes, con el proveedor que sea, tendrá que pagar una tasa por uso de la red, no vaya a ser que alguien vea la tienda y compre algo, y este señor no se lleve un duro.

Lo peligroso de esto es el planteamiento de estos proveedores (vodafone está de acuerdo con esta postura), en plan "la red es mía y te cobro cuando quiero". No señor, a timofónica se le regaló una red pública (¿eh, Sr. Aznar?) y los clientes ya pagamos los contenidos. Si les van ahora a cobrar a los que generan los contenidos o a los que permiten encontrarlos, exijo que deje de cobrarse al cliente, como sucede con la radio o la televisión. Ahora, de cobrar dos veces ni hablar. Son peor que las sanguijuelas.

Lo peor es pensar cómo semejante merluzo llega a estar a la cabeza de semejante mastodonte, como es Timofónica. Y que le apoye el gobierno. Lo cierto es que viéndolo, no sorprende que esa empresa sea como es.

8 feb 2010

¿Reforma laboral? No, gracias.


Como yo no lo explicaría mejor, y me ha parecido una entrada tan buena en muchos momentos, lo que voy a hacer es copiar algunos fragmentos vilmente, y recomendar su lectura íntegra aquí.

El tema que está en el candelero es la reforma laboral. Las empresas no ganan dinero por culpa de los trabajadores, que [...] son unos vagos, y sale muy caro despedirlos. Y el soniquete es el mismo, el que reproducen los medios de comunicación, que el Estado del Bienestar engendra ineficiencia, que los derechos de los trabajadores traen paro, que los sueldos tan elevados nos van a llevar a todos a la ruina.
Todo esto lo dicen monigotes muy trajeados, repeinados y con cara de estar leyendo la Torah o cualquier otro libro sagrado. Pero nada de ello dice la ciencia económica, la que se construye con datos y se refrenda con la experiencia.
Tomando los datos, comprobamos que España es uno de los Estados [...] en los que existe más temporalidad en el empleo, luego no peca de inflexible precisamente. Que más ha destruido puestos de trabajo con esta crisis, luego no debe ser tan difícil despedir (en la mayoría de los casos, tan sencillo como no renovar contrato). Es también uno de los países con los sueldos más bajos, sólo superado en la E15 por Portugal y Grecia, precisamente los que están aún peor que nosotros. No parece que por el camino de sueldos más bajos vayamos a acercarnos a Alemania o Francia, precisamente. Es, por último, uno de los países con menor gasto en protección social, y sin embargo, tenemos tremendas tasas de paro.
Si fuera cierto que con bajos salarios, despido barato y poca protección contra el desempleo (para no inducir a los trabajadores a la vagancia) la economía española podría recuperarse, a estas alturas deberíamos ser la locomotora de Europa, y no Alemania. Porque tenemos los sueldos más bajos, la mayor inestabilidad laboral y un Estado del Bienestar raquítico. ¿Cómo es que no son España, Portugal y Grecia, países que cumplen a rajatabla el ideal liberal, los más ricos y prósperos de Europa?
[...] En la economía española tradicionalmente ha fallado algo, y no ha sido la mano de obra.[...]
[...]Porque la capacitación y la entrega (que no es echarle más horas, que es hacerlo mejor, señores esclavistas!) se tiene que retribuir adecuadamente. Pero el miserable y cortoplacista empresario medio español siempre escogerá la opción más barata, aunque una simple regla de tres (si supiera plantearla) le mostraría que no siempre lo más barato es lo más rentable.[...]
[...]El escaso tejido industrial español se debe a un histórico apego del capitalista español por los bienes inmuebles, por ganar dinero fácilmente sin romperse la cabeza[...].
[...]Generalizando pero sin querer totalizar, [...] el empresario medio español es una analfabestia con un insaciable apetito de dinero. No sólo no tiene conocimientos técnicos para comprender el funcionamiento de su empresa, sino que tampoco los tienen económicos para dirigir el negocio: los delega en profesionales, a ser posible aduladores profesionales[...]
[...]Ese es el modelo de empresa española: endeudada, mal gobernada, con nula proyección de futuro por falta de innovación. Tiene una plantilla mal retribuida, bajo la amenaza constante del despido y harta de hacer horas extras no retribuidas para ahorrarle al patrón un puesto de trabajo más. Un capital humano desmotivado, desencantado cuando no directamente hostil a la empresa. Una empresa que sólo es capaz de competir en sectores poco sofisticados, de bajo valor añadido, intensivos en una mano de obra que él consigue barata. Esta es la apuesta de los Díaz Ferrán y Adolfo Domínguez[...]

El resto y más (alguna alternativa, por ejemplo) en La mirada del Mendigo.