Este es un vídeo realmente interesante y recomendable que me han mandado acerca de cómo empresas como Facebook o Google (y muchas otras) ponen "filtros" para que nos llegue la información que "nos gusta" más que quizá la que necesitamos recibir. Recomiendo encarecidamente verlo, no es nada largo, y muy claro de entender, y realmente revelador.
Muy bueno, tronk, muy bueno.
ResponderEliminarAcabarán controlando las veces que nos levantamos para ir al vater. Muy bueno el vídeo.
ResponderEliminarMe ha parecido una buena reflexión, sobre todo porque no es catastrofista, pero sí muy certera y sin pelos en la lengua.
ResponderEliminarLo hablaba con mendiño en una entrada que hizo sobre las herramientas para el buscador y decía que no sé como lo harán pero google ofrece resultados diferentes en función de quien los solicita.
ResponderEliminarEsto es lo que vienen a contar aquí pero que además que también sucede en facebook y otros.
Yo había notado que google en mi ordenador me daba "resultados para mi" aun cuando no estuviera "logueado", pero también consigue hacerlo, porque lo comprobé, si buscaba desde navegadores sin cookies recién instalados, e incluso en un navegador desde máquina virtual con otro sistema operativo. Pero si me iba a otro ordenador de casa los resultados ya variaban y se supone que en una casa particular, de cara al exterior somos la misma IP...
Este control de la información es determinante. Es la censura clásica que ejerce quién dispone de los medios decidiendo qué es noticiable o relevante.
Pero según lo veo yo el problema es más de fondo, pues cómo podemos esperar que una empresa sometida sabe Satanás a qué presiones e intereses decida construir un "algoritmo democrático" o ideado con algún tipo de sentido social, por ejemplo.
Si no es socializando e internacionalizando las tecnologías, los buscadores, los protocolos, los dominios, los DNS, etc. pues nunca dejarán de estar al servicio de quien los controle en cada caso.
Todo eso debería ser gestionado por un organismo supranacional tipo ONU (aun con sus carencias democráticas también) y no como ahora por empresas privadas, por el gobierno imperial o como el caso de algunos dominios por los estados.