Interesante texto, convendría reflexionar sobre ello.
Aunque para que un enfermo se cure, primero debería reconocer su enfermedad. Pero pronto un gestor público (que al fin y al cabo, es un político), reconoce que existe corrupción. Bueno sí, hay, pero en el partido de enfrente.
Nada más con los casos que conozco, ya podría llenar un libro (concursos, contratos, licencias de construcción...). La política municipal está de mierda hasta el cuello, y los otros niveles porque a tanto no llego para asomar el pescuezo.
Interesante texto, convendría reflexionar sobre ello.
ResponderEliminarAunque para que un enfermo se cure, primero debería reconocer su enfermedad. Pero pronto un gestor público (que al fin y al cabo, es un político), reconoce que existe corrupción. Bueno sí, hay, pero en el partido de enfrente.
Nada más con los casos que conozco, ya podría llenar un libro (concursos, contratos, licencias de construcción...). La política municipal está de mierda hasta el cuello, y los otros niveles porque a tanto no llego para asomar el pescuezo.