Esto es mucho.
Si nos bajan los sueldos, nos suben todos los precios ¡que
van a subir el IVA de lo básico!, y nos cobran hasta por la autovía que hay que
usar para ir a trabajar ¿qué margen queda para vivir?
Con un sueldo mínimo de setecientos y pico euros, y pagando
por ir en coche a trabajar por carreteras PÚBLICAS, y con la compra que cada día sale más y más cara, ¿qué
le queda a las familias?
¿Cómo se pueden adoptar medidas así y al mismo tiempo
recortar el transporte público (que ya no era un modelo precisamente)?
¿Pero es que no pueden aprobar UNA SOLA medida que no nos
pise más la cabeza? Lo que no puede ser es que estos partidos saquen mayorías
absolutas, sabiendo que hacen lo que hacen. En este país somos gilipollas pero
a lo grande. Eso sí, si saliera una opción más a la izquierda (aunque fuese IU)
en seguida se encargarían de quitarla de en medio. Mira qué poco tardan en
Sudamérica en echar presidentes electos democráticamente. Al final es normal
que haya tanta campaña mediática contra los que no dieron echado.
Con caceroladas y protestas pueriles no vamos a conseguir
nada, con pataletas (como esta) tampoco. Y mientras, la gente lo va perdiendo todo, aunque aún
no se haya dado cuenta.
Y es que no solo se trata de las consecuencias de todas
estas medidas, de las pérdidas de derechos y calidad de vida, sino de no demostrar tener unmínimo de dignidad, un mínimo orgullo (no el orgullo patriotero
barato que tanto fluye por ahí) personal, un mínimo de agallas y de ganas de
hacer las cosas bien y echar a la chusma del poder.
Pero claro, al final siempre somos los mismos cuatro
gilipollas izquierdosos los pesados, al resto se la trae al pairo. La gran mayoría del a gente con que le salga un currito, votar a quien le enchufe en algún lado, ratear algún impuesto, no
declarar alguna mierda de cantidad e ir saliendo airoso de todas le vale...
UNA MIERDA de país atrasado, timorato, retrógrado, cateto,
chulesco, infame, clasista, xenófobo, inculto, belicista, ladrón, estafador y
miserable, muy miserable.
Y no lo digo gratuitamente, a los resultados electorales me
remito, con la mayoría absoluta de un partido con un montón de imputados, que
ha incumplido su programa electoral
punto por punto, y que no ha dado la cara en ningún momento.
Un gobierno en el que tras crasos errores y MENTIRAS nadie asume
responsabilidades.
NADIE.
De hecho, ni jueces, ni políticos, ni banqueros, ni grandes
empresarios asumen ningún tipo de responsabilidad de sus, no sólo errores, sino
directamente de sus graves delitos.
Mientras la población de este país respalde con mayorías
este tipo de prácticas no hay iniciativa, por loable que sea, que pueda lograr
algún tipo de resultado positivo, algún cambio sustancial.
Evidentemente eso es motivo para seguir luchando, no para
rendirse, pero siendo muy conscientes de que si hubiera algún resultado a raíz
de las protestas, luchas, y reivindicaciones que se están llevando a cabo desde
cierta parte de la población (no mayoritaria) no se verá ni mucho menos a corto
ni medio plazo. Eso si algo llega a cambiar, pues la historia nos dice que en
este país, es muy difícil cambiar esa mentalidad miserable, y que si se
consigue algo, el sector más a la derecha se encarga de aplastarlo, sin, o CON las
armas.
Demostrado está.
Así que si se quiere seguir luchando, hay que saber muy bien
por qué o por quién se lucha, y darse
cuenta de lo que se tiene, de con quién se convive en esta tierra, y de lo que
la mayoría de la población de este terruño quiere.
E insisto, los resultados electorales están ahí, y por muy
mala calidad democrática que haya en este país, por mucha manipulación que haya
por parte de los medios, el resultado está ahí y es demasiado claro y
contundente. Y a la vista está que lejos de crecer, las movilizaciones menguan,
y los resultados de un cambio no llegan. NI UNO.
Esta indignación por supuesto que tampoco vale para nada,
nada soluciona, nada cambia. Pero es mi punto de vista, es mi forma de ver la
realidad actual, y no veo que otras
tendencias aporten solución alguna, desde luego mientras no se barra a toda la
chusma de ahí arriba.
Pero claro, para eso hay que querer hacerlo, y de momento España NO quiere.
Cuando el pueblo español quiera mayoritariamente un cambio
real, cuando quiera avanzar de verdad, dar un paso adelante y convertirse en un
país libre y avanzado, cuando quiera desempolvar esto:
Entonces me avisáis. Mientras, seguiré protestando, indignándome
y luchando por lo que creo, eso sí, con todo el escepticismo y la falta de
esperanza en este pueblo que se pueda tener, lejos de idealismos baratos y
esperanzas vanas. Realidad, mucha realidad y ganas de cambiar de verdad es lo
que nos hace falta.
Mientras, toda acción timorata es pasar el rato.
Estaba pensando una cosa...
ResponderEliminarNo nos pueden dejar ganar, ni tan siquiera una mínima batallita. Porque si la gente se da cuenta que protestar sirve para algo, que la unión obrera, que la presión ciudadana sí que da sus frutos, auqnue fuera en una cuestión nimia, más gente se apuntaría y se les vendría abajo todo el sistema.
En el fondo, están acojonados de que un movimiento conecte con el malestar de la gente y la movilice.
No sé si acojonados sería la palabra. Preocupados seguro. Pero tanto como acojonados... Si ves semejante movimiento como el 15M tan cerca de las elecciones, y luego sale una mayoría como la que salió, no sé si te puedes preocupar tanto.
ResponderEliminarEso sí, tienes razón en que no puede haber resquicios, tienen que estar siempre pendientes de no conceder nada al pueblo cuando protesta. Eso es lo único que deben saber hacer, habida cuenta de que no saben gobernar.
Para cuando desempolvemos la guillotina será tarde, ellos ya han pasado la cosechadora varias veces sobre nuestras cabezas.
ResponderEliminarNuestra única esperanza es hacer llegar y hacer comprender nuestros planteamientos políticos a un número de gente que termine por inclinar la balanza.
ResponderEliminarUna vez allí la herramienta de que en última instancia nos sirvamos será lo de menos; un partido nuevo, uno viejo, una coalición, un movimiento social...un lo que sea. Pero ahora mismo no tenemos nada. O casi nada.
No tenemos teles, ni radios, ni periódicos, ni dineros... Estamos desorganizados y desorientados. Partimos casi de cero y cada vez tenemos menos que perder. Ni la libertad de montar una pataleta en la calle ya casi.
Lo que sí tenemos es el hartazgo y la razón. El estar hasta los cojones.
Suficiente para empezar y quedar claro que no nos hemos rendido.
¡ Venceremos !